El jueves en UN CAFÉ CON FAMI, tuvimos un programa muy especial dedicado a los niños, con una terapia muy interesante con canes.

Pueden revisar el programa completo en el siguiente enlace:

Un Café con FAMI – Terapia con Canes para niños

¿Para qué y para quiénes sirve?

La terapia asistida con animales se la puede realizar con personas desde los 0 a 99 años, es decir que es para todas las edades. Estudios indican que es muy efectiva para tratar problemas de salud y trastornos.  En este blog nos vamos a enfocar en las terapias dirigidas para los niños.

Este tipo de terapias colaboran para niños con déficit de atención e Hiperactividad (TDHA), dolor, ansiedad o traumas. Algunos niños tienen comportamientos que les dificultan tener éxito en la escuela o al momento de desarrollar sus habilidades sociales. Unos pueden ser impulsivos, otros se les dificulta concentrarse, o muy distraídos. El objetivo de la terapia es mejorar cualquiera de estas dificultades, ya que es muy efectiva para trabajos de conducta y desarrollo de competencias en el plano cognitivo, físico, social y/o emocional.

Las terapias son individuales o grupales, se trabaja con niños autistas, así como también para adolescentes con problemas sociales, trastornos psiquiátricos o de conducta.

Se puede asistir a niños:

  • Huérfanos o que presenten problemas familiares,
  • Con algún tipo de discapacidad física o psíquica,
  • Hospitalizados,
  • Con necesidades educativas especiales,
  • Con hiperactividad,
  • Déficit de atención (TDH),
  • Problemas de socialización,
  • Autistas,
  • Con autoestima baja

Beneficios de la Terapia Asistida con Animales para niños

Con estas terapias no solo trae beneficios para el paciente, también para sus familiares y personas que acompañan al niño durante la terapia. Entre algunos de sus beneficios se destacan los siguientes:

  • Ayuda a mejorar comportamientos compulsivos.
  • Incremento de la atención y concentración. Un niño con déficit de atención puede trabajar concentrado durante más tiempo junto a un perro, por ejemplo. El hecho de que el niño desconozca cómo va a reaccionar la mascota puede provocar una mejora de sus niveles de atención.

  • Mejora la atención y el comportamiento tanto en clase como en casa.
  • Aumenta la autoestima del pequeño.
  • Incrementa la responsabilidad y la empatía.
  • Reduce los posibles efectos de la ansiedad y de la depresión.
  • Puede reducir la necesidad de tratamiento farmacológico.
  • Aumento de la actividad física con paseos o juegos.

Como prevención es mejor no llevar a cabo estas terapias con personas que presenten alergia diagnosticada a los perros.

Diferencia entre terapias y perros de asistencia

Hay una gran diferencia, a pesar que los dos cumplen un servicio de soporte a la sociedad. Los perros de asistencia son de gran soporte para personas con una discapacidad o disfuncionalidad, pues ayudan a realizar sus tareas cotidianas. Por ejemplo, acompañar a una persona ciega para que cruce la calle autónomamente.

Por otro lado, los perros de terapia están entrenados y educados exclusivamente para motivar en terapias dirigidas a trabajar ciertas deficiencias. Por ejemplo, el autocontrol, la atención, las emociones, la movilidad, las relaciones sociales, etc.

¿En qué consiste la terapia?

La Terapia Asistida con Animales para niños se inicia desde el encuentro mágico entre un niño y una mascota, aquí se produce el vínculo humano – animal, una conexión especial. Lo que conduce a la comunicación y al juego con la mascota.

Básicamente las sesiones para niños se basan en el juego y la diversión. Ellos no saben que están en terapia, para ellos es la hora de jugar con el canino. Sin embargo, el especialista sabe muy bien qué tipo de habilidades se están trabajando. Por ejemplo, con acciones como acariciar al perro, cepillarle el pelo o simplemente jugar ya son actividades que se dirigen para mejorar la vida de los niños. Para el desarrollo de habilidades motrices se puede realizar ejercicios como tirarle una pelota y que animal la traiga, o pasearle.

Es un recurso que sirve para trabajar en su beneficio. Además, cuando el niño comprueba que puede responsabilizarse de una mascota, mejora su autoestima.

Esto es un apoyo, más no, una sustitución de otras terapias. El objetivo final es que los beneficios se trasladen a la vida cotidiana del niño. Por ello es importante siempre trabajar y llevar a la par su avance con otros especialistas: psicólogos, pediatras para poder ir monitoreando su desarrollo.

PSICOLOGIA INFANTIL Y ADOLESCENTES

Los niños pueden padecer situaciones de estrés, tristeza, depresión, ira, miedo, estas emociones reflejarán conductas como agresividad problemas de lenguaje, bajo rendimiento escolar etc.

AREAS DE TRABAJO

Como hemos visto, se enfoca en todas las áreas:

  • Físicas y motrices (juegos, paseos),
  • Sociales (cuando inician su primer acercamiento al perro, cuando se comunican con el), En el caso de niños autistas, que tienen dificultades para el contacto afectivo, el trabajo se focaliza mucho hacia las habilidades sociales. La interacción con la mascota ayuda al niño a conocer sus emociones y a poderlas expresar.
  • Cognitivo – Conductual, (es un gran apoyo para mejorar problemas de lectura, escritura, lenguaje) debido a que el perro no juzga, no corrige como lo haría un adulto, él es muy noble y lúdico. Siempre preparado para jugar,
  • Espiritual – ayuda a concientizar el contacto con las necesidades que tenga el perrito, si tiene sed, si está cansado.

En una sola actividad se aborda muchas habilidades de trabajo con el niño.

¿Qué tipo de perros se usa para estas terapias?

Estos canes no son mascotas, son perros de trabajo, especializados y entrenados para ello con un profesional. Deben cumplir una serie de requisitos para que puedan ser calificados como perros de terapia asistida, entre ellas se destacan:

– Tener un carácter positivo y alegre. Un perro con un temperamento asustadizo puede desarrollar conductas no deseadas, e incluso mostrarse agresivo ante determinadas situaciones.

– Debe ser sociable y cariñoso en todo tipo de entornos, sin llegar a mostrar ningún signo de dependencia.

– Enérgico y activo, pero nunca nervioso ni ansioso.

– Imprescindible que demuestre estabilidad emocional, y un temperamento seguro y equilibrado para poder hacer frente a cualquier situación de descontrol.

– Su condición física es un valor esencial a tener en cuenta. Los perros de terapia asistida deben pasar estrictos controles sanitarios desde el inicio que son seleccionados para esta labor, para poder brindar seguridad y óptimo nivel de salud.

Pasando todos estos filtros, entonces se procede a trabajar con un especialista entrenador experto en terapias asistidas.

Razas elegidas:

Algunas razas se adhieren mejor al rol de perros de terapia, debido a sus características:

1. Labrador Retriever
Esta raza es sociable e inteligente. Responden con mucha efectividad a las labores de adiestramiento.

2. Golden Retriever
A pesar de su gran tamaño, soy muy tranquilos y amigables, además tienen desarrollado una sensibilidad especial para detectar las emociones, tanto en niños como adultos. Por ese motivo, se suelen trabajar mucho con ésta raza para intervenciones en hospitales, colegios, o residencias de la 3ª edad.

3. Pastor Alemán
Estos perros son muy seguros en sí mismos, e inteligentes.

4.King Charles Spaniel

Su pequeño tamaño hace ideal para que puedan interactuar con los más niños, son obedientes, y muy cariñosos, lo que llega ser una adoración al momento de jugar con ellos.

5 Caniche
Tienen una capacidad de aprendizaje alta, y son muy reconocidos por su inteligencia. Su fisonomía de “peluches” los acerca mucho a la interacción con niños ideal para terapias escolares.

Para cerrar, a continuación, pueden disfrutar de una entrevista realizada a Fernando Ortiz, Ortiz-Psicólogo Infantil y Psicorehabilitador:

Entrevista – Terapia con Canes

Fuentes:

1. Terapia con perros – Purina

2. Fundación-Affinity – Animales-que-curan, terapias-para-niños

3. Beneficios de la terapia asistida con animales para niños

4. Centre Psicopedagogicancel – Terapias